Sala de prensa

Culminó la Convención Internacional de Seguros 2023

Con la intervención del ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, y el presidente de Fasecolda, Gustavo Morales Cobo, culminó la última edición de la Convención Internacional de Seguros ‘Protección en tiempos de cambio’. Nombres como Ana María Ibáñez, Marcela Meléndez y Mauricio Cárdenas, fueron algunos de los que intervinieron en la tercera jornada de la Convención.

 

La mañana del viernes comenzó con la intervención de Ibáñez, economista colombiana que funge como vicepresidenta de Sectores y Conocimiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Su charla se tituló ‘Los cambios estructurales de la economía y su impacto en el sector asegurador’ y en ella habló sobre cómo ha sido el crecimiento de la región. “En América Latina y el Caribe hemos tenido crecimientos insuficientes para converger con las economías avanzadas”, dijo.

 

Según Ibáñez nuestro crecimiento se ha basado en añadir capital y trabajo, pero la productividad ha sido plana. “Por eso el crecimiento ha sido insuficiente”. Una de las razones sería que esta es una región altamente expuesta a los choques climáticos y desastres naturales, característica que, en términos extremos, puede llegar a afectar el déficit fiscal con un aumento de casi 1% del PIB.

 

Panorama que no tiende mucho a cambiar, pues para la experta, el potencial de crecimiento está limitado por la formación deficiente de capital humano. “Acá se gasta poco en capital humano, lo que se refleja en baja calidad en la educación. La alta informalidad impide tener un sistema social eficiente, lo que impacta la productividad del país y reduce la capacidad de recaudo".

Ana María Ibañez

 

Para Ibáñez, la inversión en infraestructura de la región es de 1,4% del PIB, pero debería ser del orden del 3,1% para hacer la diferencia. Esto, que aumenta la pobreza estructural, se podría mejorar a través de la inversión en educación. Asimismo, afirmó que el atender la pobreza estructural y la alta vulnerabilidad de la región requiere de sistemas de protección social efectivos y un sistema tributario más redistributivo.

 

Sobre el sector empresarial, dijo que, si queremos crecer y tener productividad, debemos reducir el costo de crear empresas y el costo de capital. En el caso asegurador, la vicepresidenta seccional del BID afirmó que en la región hay una falta de mecanismos de aseguramiento que afecta a los sectores y ciudadanos más vulnerables.

 

Acto seguido, Meléndez, asesora senior en la Oficina del economista jefe para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, dio su charla ‘Dos aproximaciones a la economía regional’. Una de sus tesis principales fue que la región tiene retos importantes para reducir la pobreza.

 

Parte de eso, afirmó, está en el sector laboral. “En Latinoamérica 53 de cada 100 trabajadores trabajan por cuenta propia o en negocios de menos de 5 trabajadores. La tasa de informalidad es consecuencia del marco regulatorio que ha excluido a sectores poblacionales”, dijo.

 

Una de las razones sería las deficiencias en los marcos regulatorios que impiden el crecimiento económico. "Los marcos regulatorios de los países de la región ponen altas barreras para la formalización de del mercado laboral".

 

Sobre el sector asegurador, Meléndez dijo que este juega un rol central en el desarrollo y será clave en los cambios estructurales que se necesitan para mejorar la inversión y el crecimiento. “La reducción de la incertidumbre a través del aseguramiento viabiliza inversiones y mejora la calidad de vida”, dijo.

 

"Hay que pensar en coberturas y seguros en salud para los trabajadores informales, de manera que se puedan plantear subsidios a estos por parte de los Estados", sentenció Meléndez.

Mauricio Cárdenas

El bloque concluyó con la intervención de Cárdenas, exministro de Hacienda. Su participación estuvo centrada en los retos políticos y económicos que enfrentará el país en los próximos meses. Y, como parte de ‘tranquilidad’, el exminhacienda dijo las instituciones colombianas son fuerzas moderadoras ante narrativas radicales.

 

“En Colombia hay una política muy transaccional de forma, descrita por Miguel Urrutia,  dice que en Colombia no puede triunfar el populismo porque hay mucho clientelismo. Eso da un parte de tranquilidad”, sentenció.

 

Para el tema económico, el exministro afirmó que para que el desempleo baje, la economía debe crecer, como mínimo, 3%, algo que no va a pasar este año. Y si bien es cierto que las tasas de interés no van a subir más, tampoco van a bajar demasiado rápido. El dólar, por su lado, dijo que es posible que se mantenga estable en la medida que a pesar que los fondos de inversión están sacando divisas del mercado, los fondos de pensiones están metiendo.

 

En términos más macro, Cárdenas dijo que para poder sostener el nivel de gasto que quiere el Gobierno y mantener la regla fiscal, se deben tener unos ingresos muy altos. “Si no se tienen ingresos adicionales, se presenta un riesgo de incumplimiento de la regla fiscal”, afirmó.

 

Para las elecciones de octubre, agregó, los resultados serán fundamentales junto con la evolución de la favorabilidad en las encuestas. Ambas cosas determinarían los escenarios que enfrentaría el Gobierno Nacional en el próximo año. "Hay dos grandes preguntas en materia de sostenibilidad fiscal en las próximas vigencias ¿se seguirá cumpliendo la regla fiscal? o ¿se cederá a las presiones políticas? Es algo que se definirá en octubre", afirmó.

 

 

“Si al Pacto Histórico le va bien en las elecciones y es alto el respaldo popular al Presidente en las encuestas, el escenario que se prevé es de una postura más radical. Pero aunque el pronostico es que la popularidad del presidente seguirá bajando por razones políticas y económicas, el no cambiará su discurso”, sentenció.

 

Por último, el exministro dijo que lo más importante es evitar que la situación política local conduzca a un deterioro de la política fiscal que pueda dejar secuelas económicas.

 

Eduardo Braun

 

Eduardo Braun, especialista en liderazgo y gestión de cultura organizacional, se encargó de la conferencia dirigida a los empresarios de los seguros con su charla ‘Las personas primero: Chief Emotions Officers’. “La cultura organizacional deben enfocarse en las habilidades blandas, moverlas a través del corazón”, afirmó.

 

Braun también dijo que la cultura multiplica resultados y es algo que todos podemos hacer en nuestros equipos así no seamos jefes, porque la cultura la podemos gestionar todos. “Como dijo Tony Hsieh: la cultura es mas importante que la estrategia”.

 

El experto agregó que la única forma de dar un excelente servicio al cliente es con un equipo que se siente feliz. “Estrategia es todo lo que da pasión y esperanza, que da sentido de pertenencia, aquello que aumenta la autoestima y la confianza, que genera emociones positivas”.

 

Bajo ese supuesto, para Braun nadie puede encender el corazón de otros si no tiene el propio encendido. Según él, un equipo es un estado de ánimo y el impacto que tiene es la clave del éxito o fracaso de la organización.

 

“La invitación es a que cada uno sea gerente de estado de animo: Chief Emotions Officers. ¿Te preocupa real y genuinamente por cada integrante de tu equipo? Esa es la pregunta que siempre debemos hacernos”, dijo.

 

Los gerentes, puntualizó, deben priorizar la escucha y la generosidad. Asimismo incentivar la confianza es la argamasa del trabajo en equipo y “se logra con comunicación”. “Hagamos organizaciones tan humanas como la gente que trabaja en ellas”, finalizó.

 

El ministro de Hacienda y el presidente de Fasecolda clausuraron la convención

El presidente del gremio, Morales Cobo, comenzó su discurso pidiendo un minuto de silencio por el fallecimiento del Dr. William Fadul Vergara. “Esta organización, Fasecolda, no existiría sin el impulso, la iniciativa, la energía y el liderazgo del doctor Fadul, como lo saben todos los aquí presentes. Tampoco existiría esta Convención”, dijo.

 

Frente a lo capitulado durante los últimos tres días, afirmó que “con los eventos y actividades aledaños a la Convención hemos hecho visibles y en detalle los resultados tangibles del sector, ramo por ramo, para ilustración de la opinión pública. Quiero destacar que en el 2022 pagamos beneficios e indemnizaciones para proteger la vida, la salud, los ingresos y el patrimonio de los colombianos, por $21,3 billones, y en lo transcurrido del 2023, lo hemos hecho por $10,1billones”.

 

Morales también reiteró queque de todas las formas que las sociedades tienen para protegerse y gestionar los riesgos que imponen la naturaleza y la vida en común, el de los seguros es el socialmente más eficaz, porque en él todos ponemos para ayudarle al que sufre una pérdida.

 

“Difícil pensar en un esquema más revolucionario por lo solidario y progresista. Dos recientes tragedias ocurridas hace algunas semanas en Colombia ilustran la forma en que los seguros mitigan y protegen”, dijo.

 

En la misma línea puso un ejemplo. “Hace poco, en la misma semana, se accidentó un bus intermunicipal en El Playón, Santander, que dejó 11 muertos y más de 30 heridos, y también ocurrió el deslizamiento por inundación en Quetame, Cundinamarca, con un triste saldo de 29 víctimas mortales.

 

En el primer caso había una red de seguros de personas y de daños que permitieron a las familias afectadas sortear de mejor manera la tragedia, y el Estado no tuvo que cubrir la totalidad de las afectaciones.

 

En Quetame, en cambio, cono lo señaló el presidente Petro en su discurso del 7 de agosto, un entorno sin seguro alguno, el Gobierno tuvo que asumir desde la recuperación de las viviendas afectadas hasta el valor de las cosechas perdidas –que un seguro agropecuario habría podido cubrir–, para no hablar de los auxilios económicos a las personas damnificadas.

 

Este es un ejemplo de la eficacia social y solidaria de los seguros. Esa es la razón por la cual los miles de personas que trabajan en esta industria se levantan todos los días motivados a seguir sirviendo y protegiendo a sus clientes y protegidos. A ellos, gracias por ese invaluable servicio a la sociedad”, puntualizó.

 

La principal amenaza para lograr el aumento de la penetración de los seguros, analizó es, a contrario sensu, un crecimiento económico mediocre o negativo; por esta razón, dijo que Fasecolda apoya la eliminación de todas las barreras estatales injustificadas a la actividad empresarial y a la creación de nuevos empleos.

 

“Por eso, compartimos las propuestas que desde el año pasado formularon la OCDE y el Consejo Privado de Competitividad para eliminar los costos de la renovación de la matricula mercantil, y la revisión a la baja de los aportes a las cajas de compensación”, dijo.

 

Morales también dijo que la principal debilidad para conseguir una mayor penetración de los seguros es la pobreza. “Desde hace varios años, el sector tomó la sabia decisión de incluir, en todos los ramos posibles, a los segmentos sociales tradicionalmente marginados dentro de sus planes de protección. No se trata de esperar a la reducción de la pobreza para aumentar la penetración, sino de que los seguros sean instrumento esencial para reducir la pobreza”.

 

Agregó que convenios como el firmado ayer para promover los seguros en la economía popular, se inspiran en ese principio. Otro ejemplo: Nuestro sector ha suscrito ya más de 2.800 pólizas para garantizar el cumplimiento de los convenios solidarios con juntas de acción comunal, y seguirá profundizando este frente, en trabajo conjunto con entidades como Colombia Compra Eficiente.

 

Finalmente, dijo que hay muchas oportunidades que apuntan a incrementar la penetración de los seguros, entre las que destacamos el enorme espacio para la innovación aseguradora en el complejo conjunto de transformaciones que nos llevarán a una economía más “descarbonizada”. Entre ellas, destacó  las relacionadas con la lucha contra la deforestación, tema de la cumbre de esta semana en Belén de Pará. Pero para que su implementación tenga éxito, los seguros, dijo, son imprescindibles

 

“En tiempos de cambios sistémicos globales, veloces, simultáneos y profundos, las sociedades y los gobiernos no tienen mejor aliado que el sector asegurador para proteger a los suyos.  Siempre que las autoridades nos convoquen en un contexto de unidad y diálogo, el sector asegurador estará presto a contribuir en la mejora de las instituciones y las políticas, y en la profundización de la protección de todos”, puntualizó.

 

Por último, y como encargado del cierre de la Convención, el ministro Bonilla comenzó su intervención diciendo que el sector ha venido mostrando un mejor comportamiento en los últimos meses en comparación con el PIB.

 

“El dinamismo reciente del sector de actividades financieras y de seguros ha estado explicado. principalmente, por el comportamiento de los seguros, los cuales han crecido, en promedio, 40,1% en los últimos tres trimestres”, dijo.

 

En esta misma línea, el encargado de las finanzas del país aseguró que el sector asegurador emplea a más de 63.000 personas de manera directa e indirecta. Esto fue, agregó, solo uno de los logros de la industria, en la medida que ha aportado al dinamismo y crecimiento de la economía.

 

Referente a lo dicho por el exministro Cárdenas, Bonilla afirmó que el país tiene tres retos para cumplir con la regla fiscal. El bajo crecimiento económico en el que destacó que nadie ha pronosticado una recesión, en el peor de los casos se ha proyectado bajo crecimiento entre 1,7% y 2%; las deudas de la Nación y el control de la inflación.

 

Sobre las reformas, el ministro insistió en que este no es un tema del Ejecutivo y que le corresponderá al Congreso decidir sobre ellas. Allí, aclaró, el Gobierno no repartirá ningún tipo de ‘mermelada’ para beneficio de los proyectos. Respecto a la Laboral, agregó, se reunirá el lunes con la ministra Gloria Ramírez para hablar varios puntos sobre el proyecto.

 

En cuanto al SOAT y el ‘cartel de las ambulancias’, Bonilla insistió en que la clave está en hacer más pedagogía. “Las personas no saben a lo que tienen acceso y por qué es importante contar con este tipo de pólizas”. Dijo, la tarea es conjunta y que el gremio puede contar con el Gobierno para llevarla a cabo.